26/2/09

Mujeres...Mujeres...cobran?...Muñeco Roto.

Habíamos terminado en esa ciudad, y pues viajábamos a otra, pero en autobús, porque tuvimos problemas en el aeropuerto, según no podíamos aterrizar, porque en esa ciudad no había aeropuerto y pues a viajar por carretera, me sentía cansado, y decidí acostarme en una de las camas del autobús, miraba hacia arriba, y veía un espejo, en el se reflejaba los estragos de la gira, como siempre mis pensamientos giran y giraban, de pronto se vieron interrumpidos por Daniela, Karime y German, quienes se acercaron sonrientes y con sus comentarios, ya se imaginaran lo que sucede en un autobús, bromas, risas, anécdotas, en fin, es una forma de eludir lo cansado del viaje, ellos me decían de que soy experto en amor y que mucho de mujeres, y aunque todo en teoría, me atribuían esos adjetivos, se retiraron y mis pensamientos se encaminaron a analizar si era cierto o tal vez era solo una simple apreciación por parte de ellos, pero creo que de tus congéneres he aprendido demasiado a fuerza de experiencia: de recibir golpes, de disfrutar caricias, de analizar gestos y de escrutar miradas, de poner atención a todas sus rutinas, de contemplar sus reacciones sin desdeñar ninguna, pero si como ayer me preguntaran ¿De qué hablan en privado las mujeres?, te cuento que no haría más que imaginarlo, porque de ese picante intimo y sensual que ponen mis amigos en boca femenina no me consta nada, unos dijeron que hablaban de sexo con crudeza, que describían sin pudor los detalles de todas sus faenas, que iban más allá del éxtasis revelando sus íntimas pasiones, que ideaban el comportamiento amatorio de los hombres, peor aún, que eran perversas, deshojando la honra de los machos, o de los hombres, nada opiné, me deleité pensando que nada es imposible, en cambio me enfrasqué en una entretenida discusión sobre mujeres ciles, se dijo por ejemplo que si tan cil es su vida ¿por qué las damas más dignas no suelen practicarla?, German con doble intención se pregun¿qué es una prostituta?, y dirigió nuestras respuestas hasta demostrar en su sofisma que otras son las que se comportan como tales, te cuento que con nuestras conclusiones terminaron las señoras en la calle y las trabajadoras sexuales en el altar de los hogares, mas lo confieso, soy culpable de erigir en verdad tal esperpento, dije que identificaba la prostitución como una actividad en que pesa más que el dinero y el servicio que se transa, la consumación de un acto, por parte de ellas, sin pasión y sin afecto, si de cobrar se trata, dijimos que el médico cobra su receta, la mujer en el hogar, cobra por sus servicios, escondiéndose en la pensión alimenticia, el eticista sus conferencias y consejos, y el Sacerdote hasta las misas, los músicos cobramos hasta la risa, las lagrimas y desconsuelo, cobrar, terminamos diciendo no es problema, lo que molesta, entristece es la palabra, es tener que entregarse sin deseo, fue entonces cuando salieron a relucir las esposas que hastiadas de prestar “servicios conyugales” lo siguen haciendo porque el esposo “es el dueño de su cuerpo”, porque deben cumplir una obligación que impone el matrimonio o deben cuidar en últimas el seco y la sopita, “¡más putas pa´nde!“, dijo alguien, ¿y si las damiselas disfrutan no son putas?, pregunté con ironía, claro que no, respondieron todos por consenso, si lo son, no lo son tanto, fue la conclusión de todas las mujeres presentes, mas como nadie pidque las opiniones se guardaran con reserva, diviértete con estas ocurrencias, mas no pienses que la mujer y el sexo son la única fijación de la mente masculina…por cierto algunas mujeres me llaman: bebe, cariño, muñeco, flako, pero mi corazon solo pertenece a una sola, jamas sere infiel, ese es mi defecto, los comentarios que colocan en este espacio, son solo comentarios...gracias por ellos, total es dedicado a todas ustedes, mujeres bellas, feas, gordas, flacas, hermosas todas ellas, en fin simplemente hermosas y bellas mujeres...Renato Alatriste Mont.