La visita inesperada...hablo de la bondad...

Me encontraba en mi camerino cuando tocaron a la puerta, Sergio se dispuso a abrir, cuando escuche una voz femenina y Sergio le decía: “pase, ahora te atiende Renato, ante mi extrañeza, por la visita, pues jamás me vistan alguien, seguí acostado en mi cama vacía, entro Sergio y me dijo en voz baja: “es Natalia Jiménez vocalista de la 5ta Estación” y ante mi sorpresa le argumente: “y que desea”, pues no se, tal vez como alternaremos con ellos, quiere platicar contigo”, para ser sincero, me puse de pie de malas ganas, pues no me gusta recibir a nadie en el camerino y mucho menos antes de comenzar el show, asi que para ser amable, me puse de pie y camine hacia la puerta, y ahí sentada en la sala de espera, estaba una hermosa mujer, con su rostro sonriente me exclamo: “soy Natalia Jiménez, y quería saludarte”, la mire fijamente a sus ojos y le dije, “bien aquí estamos, gracias”, y ella sin soltarme la mano, me dijo: “asi que tu eres el misterioso Muñeco Roto o Renato?”, le sonreí y le señale: “no soy un hombre misterioso, pues el publico me conoce, aunque si soy algo solitario, pero asi soy, algo timido diria yo”, y ella, se sentó, mientras Sergio le ofrecía un refresco, ella cruzaba sus piernas, algo clásico en las mujeres cuando se sientan, no sé porque siempre lo hacen, y mi mirada estaba alerta, a sus movimientos, su diminuto vestido dejaba volar la imaginación de cualquier hombre, su pie era mecido inconscientemente, y asi platicamos cosas de trabajo y de pronto ella me dijo: “Renato, me inspiras confianza, y tu mirada es triste porque?“, baje mi mirada y le dije: “no sé, eso me han dicho”, y para tratar de desviar su mirada le pregunte: “y ya te casaste?”, ella me miro fijamente y me dijo: “estuve a punto de cometer el error más grande de mi vida, me casaría con Antonio Alcol, el día 13 de marzo, en España, pero es mejor asi, y la vida como decimos nosotros, tiene que seguir”, en su voz y en su mirar sentí una tristeza profunda, una soledad de desamor, sentí que había cometido un grave error, y fue ella que me pregunto: “y tu cuando te casas?”, me sonreí y le dije: “mira, la distancia, mi trabajo me separa mucho de ella, amo a la mujer y sé que algún día formare una familia”, Natalia Jiménez, me miro fijamente y me dijo: “ese es el principal problema de nosotros, nuestro tiempo, la distancia, acaba con el amor”, asi es, le respondí, ella cambio de posición sus piernas, era algo que me inquietaba, y creo que todas las mujeres siempre tienen algo de coquetas, lo reflejan en sus miradas y siempre me pongo nervioso, creo que es algo natural en mi persona, ella me dijo: “Con tu mirada me siento iluminada, no escapo a la comparación inevitable con aquella otra que siempre me increpaba”, y sorprendido le pregunte: la mirada de quien?, te increpaba”, ella me respondió: “la de Antonio”, y continuo diciéndome: “Me acostumbré a la tortura de un rostro que no tenía otra marca que el enfado, que se veía cansado y rendido por su propio enojo…Que guardaba en sus facciones ira contra el mundo y que atrapaba en sus líneas la amargura…Tu imagen, Renato que mundo tan distinto muestra…Tú que sufres y has sufrido tanto, sólo tienes dulzura en la mirada…Debe ser la bondad una cualidad innata, ajena a los tropiezos de la vida…Quien con ella llega al mundo, sólo tiene corazón para el olvido, para el perdón, para verter bendiciones entre sus semejantes…Quien sin ella nace no tiene más aliento que para causar dolor sin importar el bien que le prodiguen”, sorprendido no sabía que responder, como era posible que esta persona, de nombre Natalia Jiménez, que apenas me conocía, pensara eso de mi persona, pues ella, había estado en más de una ocasión durante el show, la recordaba en la primera fila, y solo le argumente: “gracias por pensar eso de mi, pero recuerda de que soy un ser humano, con defectos también”, ella, entre abrió sus piernas, sin que se diera cuenta, mi mirada escabullo, hacia el interior, su diminuto vestido y esas piernas cruzadas, a cualquier hombre lo llevaría hasta la locura y me señalo: “Renato, por tu bondad tu rostro es más joven que tus años, por tu bondad son tus ojos trasparentes a la mirada que quiera escudriñarte, por tu bondad tu voz es suave, por tu bondad es tu instinto paternal y tu piel de terciopelo…Por tu bondad ha sido cautivada mi alma”, “óyeme no digas eso, antes que continúes quiero que me digas, el porque piensas asi de mi” fue lo que pudo salir de mi garganta, sonriendo me dijo: una de nuestras canciones, -solo es un minuto- la letra es tuya, y desde ahí te conocí, sin conocerte, por tu sensibilidad y tu espíritu vibra con las cosas tiernas y es el mejor receptor a las expresiones sensibles de mi alma”…mientras ella hablaba mi pensamiento volaba, pues como era posible que me conociera sin conocerme, y mientras agregaba: “Contigo puedo compartir el éxtasis de la música que llamamos culta, el colorido de un cuadro, la emoción de una obra de teatro y la fuerza y el sentimiento de un poema…Tu gesto durante tu show aprueba mis sentencias y tus ojos brillan con los mismos motivos que me exaltan…Eres el alma gemela que al Cielo reclamaba”, fuimos interrumpidos por el llamado para salir al escenario, ella, se puso de pie y me dio un beso en la mejilla, le correspondí, sin salir de mi sorpresa, camino al escenario, acompañado de los “gorilas” le pregunte a Sergio, grabaste la conversación? Y como respuesta recibí un si, afirmativo, y el consentimiento de Sergio, para transcribir dicha plática, como es posible que una mujer de carácter, piense de esa manera de mi y tenga el carácter para suspender una boda, gracias Natalia Jiménez, por tan bonita charla, acá siempre te recordare como una buena amiga de España…