Cuando muera Renato, sobre su tumba alguien escribirá: "Aquí descansa un hombre recto, no bebía, no fumaba, no bailaba, no amanecía en la calle, no discutía y atendió a su mujer la soledad durante toda su vida"…Debes saber de que tus palabras suelen reanimar toda mi fe, porque Jesús es venir a cantarles esta canción que nace estrictamente del corazón, abandone con amor este día mi calle, mi escenario para venir a compartir mis canciones con mis hermanos los chicos y chicas de la calle…Pero tus palabras me hacen recordar: “quién soy”, aunque para algunos sea misterio, para ti soy “algo mas”…Nadie verá dentro de mí con tanta claridad, nadie jamás entenderá lo que has hecho en mí…Déjame vivir en ti, contigo no hay dolor, déjame morir por ti, por ti sería un honor, déjame...Tus palabras pueden desafiar a mi convicción tus palabras pueden detonar mi voz…Y nunca olvides de que Jesús se ríe de los curas con manos femeninas son tan finos que en vez de peregrinos parecen peregrinas, hace falta más que una sotana para comprar el boleto al cielo, por ello, nadie sabrá que guardo aquí bajo este corazón, nadie jamás descifrará lo que has hecho en mi…Déjame vivir en ti, contigo no hay dolor, déjame morir por ti, por ti sería un honor déjame...Te preguntaras que deseo decir, si decir no significa nada, lee detenidamente y sabrás cuán difícil es pedir perdón…¿Puedes perdonarme otra vez?...No se que dije, pero no quise hacerte daño, yo escuche salir las palabras...Siento como si muriera, me dolió mucho herirte…Entonces tu me miraste, ya no gritas mas, tu estas en un silencio roto…Te daré algo ahora que mate esas palabras tuyas…Cada instante yo digo algo, me arrepiento, lloro:"Yo no quiero perderte"…Pero de alguna manera se que nunca me dejaras tú estabas hecha para mi, de algún modo yo intentare verte, tú me haces feliz…Yo no puedo vivir esta vida sin ti a mi lado, te necesito para sobrevivir quédate conmigo…Tú miras en mis ojos y yo gritó por dentro que lo siento…Y perdóname otra vez, tu eres mi verdadera amiga, amante y compañera y siento hacerte daño…Eso era lo que quería decir y decir no significa nada, pero:"Yo no quiero perderte", porque ahora ya se “quién soy” y aunque mi tumba este vacía siempre habrá “alguien” que escriba: “Aquí descansa un hombre recto, no bebía, no fumaba, no bailaba, no amanecía en la calle, no discutía y atendió a su mujer la soledad durante toda su vida"…Y los reflectores seguiran encendidos, aunque yo no este, yo no quiero perderte.
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