2/9/08

Solos tu y yo...

Sabes estoy escribiéndote palabras al ritmo de mi corazón, palabras que no pueden reflejar tu inmensidad, vacías pero llenas de fascinación, estoy regalándote palabras de amor que matan mi voluntad, pues te imagino en la distancia, llena de suspiros de amor y sosiego, con tu mirada perdida en la soledad y con un beso que desea escapar de tus labios hacia los míos, pero en este momento pensaba en ti, es que no puedo dejar de hacerlo, en lo mucho que te quiero, pensaba también en el momento en que te conocí, ya que en ese momento no sabría lo mucho que te llegaría a querer, es que al irte conociendo, me fui enamorando más y más, no sabes cómo gozo aquellos pequeños momentos que paso contigo, de lo que me platicas o solamente si permaneces callada, eso me lo demuestras cuando no me escribes, es que el hecho de estar contigo es inigualable, aunque sea solo mirando tu fotografía, sabes contigo me he dado cuenta de que el amor no tiene límites, he realizado muchas locuras, que puede ser muy grande de lo mucho que se puedes llegar a querer a una persona, y de lo mucho que se le puede extrañar cuando no está contigo, pero es que yo ya no puedo hacer nada, y es que no te vas de mi mente, no consigo olvidarte a través de los segundos, no olvido tus caricias y tus besos, estás ahí y estarás mientras mis ojos puedan llorarte y mis manos recordar tu piel, tal vez ahora tú no puedes responderme, mi buzón vacio esta, al igual que mi cama, siempre vacía, sabes que ya me resigne a no tenerte esta noche, aunque me hubiese gustado que tú me llegaras a querer alguna madruga, si esas madrugadas en que de mis sueños te apoderas de mis fantasías, se que difícilmente aquel momento llegara, en que tu decidas entrar en mis sueños, así silenciosamente, desvistiéndote y con tu mirada picara, seduciéndome, porque tú no puedes obligar a tu corazón a quererme, pero yo tampoco puedo decirle al mío que te deje de querer, sabes entrégame un beso, una mirada y una caricia, yo te devolveré mi mundo, mis fantasías, mi amor y cada trozo de mi vida, tú y yo, entregados a las mismas notas musicales de la ilusión, tu y yo, soñando despiertos en alargar los segundos juntos, tu y yo, sin mas mundo que tu y yo...