Sabes debo confesarte de que si no puedo ser el dueño yo, nunca podrás olvidarme, porque yo te di todo mi amor, y eso tu muy bien lo sabes, aprenderás de que en verdad soy una especie en peligro de extinción, cuando me hicieron el molde se rompió, pero la vida te enseña a caer y levantarte, siempre hacia adelante, jamás mirar atrás, pues me iré con el recuerdo, de haber visto morir aquel cariño que recorría la geografía de tu cuerpo, y de vez en vez, me detenía en la orilla de tu ombligo, ahí pensaba, iré al sur o iré al norte de tu ombligo, la decisión era difícil, porque siempre quería caminar del norte al sur, mañana será otro día, pero te juro que mi deseo es que quiero volverlo a vivir, tratando poquito a poco, de pensar menos en ti; Señor, siempre estoy pensando en ella, pensando en que hará, siempre estoy, rogando que vuelva, mi llanto calmar, aunque sea solo en sueños, su geografía poder descubrir, pero cada mañana despierto con una ilusión de encontrarla en cada mañana y darle mi amor; siempre estoy buscando en las cosas un poco de ti y en la dulce sonrisa de Muñeco Roto, la fe que perdí, pero cada mañana despierto con una ilusión de encontrarte en cada mañana y darte mi amor y darte mi amor, aunque la distancia nos separe, cada madrugada le pondré nombre a cada uno de tus besos, a cada caricia, a cada palabra, a cada mirada, así no podré olvidarte, aunque me vaya y no recuerde tu amor, recogido en tu regazo, inmovilizado por tu dulzura, soñando con no despertar de tu sueño, imaginando mi vida contigo...refugiado en ti…aceptaras?
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